Los conductos de aire flexibles son componentes esenciales de los sistemas de calefacción, ventilación y aire acondicionado (HVAC), diseñados para entregar y distribuir aire acondicionado de manera eficiente a través de edificios residenciales, comerciales e industriales.

Estos conductos están hechos de materiales flexibles como plástico, aluminio o goma, lo que permite una fácil instalación y enrutamiento alrededor de obstáculos.

Los conductos de aire flexibles se utilizan ampliamente en diversas aplicaciones debido a su versatilidad y adaptabilidad. Son comúnmente utilizados en sistemas HVAC, sistemas de ventilación y unidades de aire acondicionado. Su flexibilidad permite una instalación fácil en espacios reducidos y alrededor de obstáculos, lo que los convierte en una opción ideal tanto para edificios residenciales como comerciales. Una de las principales ventajas de los conductos de aire flexibles es su capacidad para reducir la transmisión de ruido, asegurando un ambiente tranquilo. También proporcionan un excelente aislamiento térmico, evitando la pérdida o ganancia de calor.

Existen diferentes tipos de conductos de aire flexibles disponibles, incluidos los conductos de aluminio, conductos de PVC y conductos aislados. Estos conductos vienen en varios tamaños y longitudes, lo que permite personalizarlos según los requisitos específicos. Al instalar conductos de aire flexibles, es esencial considerar un sellado y soporte adecuados para garantizar un rendimiento óptimo y eficiencia energética. En general, los conductos de aire flexibles son una solución práctica y eficaz para una distribución eficiente del aire en diferentes entornos.